La Federación de Empresarios Farmacéuticos de Castilla-La Mancha (FEFCAM) ha llevado a cabo una encuesta online entre las oficinas de farmacia de la Comunidad Autónoma con el objetivo de descubrir cómo les ha afectado en sus condiciones laborales y personales la pandemia de la COVID19. En dicha encuesta los farmacéuticos han respondido a un cuestionario en el que se les planteaban algunas de los temas que más pueden preocupar a este sector en la situación actual.
Naturaleza metodológica: Cuantitativa
Tipo de cuestionario: Estructurado
Elementos del muestro: Oficinas de farmacia de Castilla-La Mancha
Tamaño de la muestra: Respondieron al cuestionario 91 farmacias
RESULTADOS DE CADA PREGUNTA Y CONCLUSIONES
La mayor preocupación de los farmacéuticos comunitarios en la situación actual tiene relación con su salud personal (45,1%), sin olvidar la importancia de la sobrecarga de trabajo (22%).
La respuesta mayoritaria a esta pregunta (54,4%) es que las oficinas de farmacia de Castilla-La Mancha conservan los mismos clientes que antes de empezar la crisis de la COVID19, pero con mucha más carga de trabajo y estrés. Aún así, el 26,7% afirma haber perdido clientes, un hecho que puede estar relacionado con farmacias emplazadas en lugares de paso y, por lo tanto, más dependientes del turismo.
Las farmacias de la Comunidad no sienten reconocidas su labor y esfuerzo (60%) aunque un 35,6% sí cree valorado su trabajo por parte de los ciudadanos. En las ampliaciones a estas respuestas aparece de forma recurrente mencionada la Administración como señalada por la falta de reconocimiento.
4 de cada 10 farmacias admiten haber padecido contagios por COVID19 en algún momento entre el personal de su farmacia. Pese a las medidas de prevención, el riesgo 0 no existe y, más aún, cuando se atiende de forma presencial a cientos o miles de personas de forma diaria. En relación con este riesgo para la salud, un encuestado amplía su respuesta afirmando que “creo que no se ha tenido en cuenta la importancia del servicio farmacéutico ni el riesgo que corremos cada día, estando directamente en contacto con el paciente, muchos infectados por el COVID”.
La sobrecarga de trabajo y el riesgo para la salud por posibles contagios son factores íntimamente relacionados con esta respuesta. Insomnio (14,3%) y ansiedad (51,2%) son problemas de salud recurrentes entre los farmacéuticos.
La mayor parte de los farmacéuticos comunitarios (57,8%) son partidarios de vacunar en las farmacias pues creen que sería una medida útil para controlar la pandemia. Solo un 18,9% responde de forma negativa a esta posibilidad. Reino Unido, Francia, Irlanda, EE. UU y Australia son algunos países que ya han confirmado la inclusión de las boticas en sus campañas de vacunación frente a la COVID19.
Los encuestados (48,9%) opinan que la farmacia comunitaria de Castilla-La Mancha ha demostrado de forma prioritaria durante la pandemia su implicación en la sociedad, tanto ofreciendo soporte a domicilio como información y donación de materiales, entre otros servicios. Además, el 21,1% cree que también se ha comprobado su capacidad de adaptación y el 15,6% que se ha reforzado su papel sanitario.